Cualquiera que me conozca sabe que me encantan las cosas sencillas, bonitas, con personalidad y que me acompañen mucho tiempo.
Tengo pocas, pero cada una tiene detrás una historia y forma parte de mi pequeño universo.
Y desde que somos tres, me vuelvo loca intentando que las cosas de Bichita cumplan esos requisitos. Pero hace unos días buscando cositas para cuando empiece a comer sólido, encontré estas dos marcas que son estupendas.
La primera me gusta, pero la segunda me vuelve loca.
Ha sido elegido producto del año en 2012 de productos de alimentación infantiles.
El movimiento de balanceo involucra al bebé que se ríe a la hora de comer, mientras estimula el desarrollo y el crecimiento! Además la nueva tecnología a prueba de derrames evita fugas y garantiza la máxima higiene, ya que la pajita se guarda dentro de la tapa.
Y la forma redondeada y ergonómica está especialmente diseñada para que las manos de los peques puedan agarrarlo fácilmente. Ah! y la pajita es de silicona suave para no interferir en el desarrollo de los dientes y las encías.
El “traje” termal es ideal para mantener la temperatura de líquidos cuando salimos, y lo mejor es que se puede fijar fácilmente al cochecito gracias a su gancho ajustable.
A nosotros nos han regalado el tenedor y es súper bonito!
y esta es la colección que me tiene enamorada!
EKOBO
Esta marca trabaja únicamente con bambú porque es uno de los recursos más renovables de nuestra tierra . Es una hierba leñosa de crecimiento rápido, que florece orgánicamente y sin pesticidas, fertilizantes o herbicidas. Se puede cosechar continuamente cada 3 años sin dañar la planta o el medio ambiente circundante.
El bambú es una solución viable al problema de la deforestación , ya que recicla el dióxido de carbono y produce un 30 % más de oxígeno que los árboles en una situación similar
Ekobo ha reducido el número de intermediarios (fábricas , agentes locales, exportadores…) y realiza un comercio directo con los pueblos de bambú y pequeños talleres. Como resultado , los artesanos reciben salarios más altos, las relaciones y la colaboración se fortalecen, y se mantienen altos estándares de calidad .
Y comparte su experiencia y su innovador diseño con los artesanos para agregar más valor a sus habilidades en el mercado actual . Esto limita la necesidad de los artesanos a abandonar sus pueblos en busca de trabajo en las grandes ciudades.
Sus productos se envuelven en papel reciclado y cajas de cartón en el pueblo. Viajan por mar y no por aire. Y reutilizan las cajas de envío para preparar los pedidos finales. Todos los palets se compran de segunda mano en las proximidades de su almacén en el sur de Francia.
Estos productos son contemporáneos pero defienden y protegen los conocimientos antiguos. Cada producto está hecho a mano en Vietnam y dan forma al bambú por expertos en técnicas tradicionales.
El proceso es meticuloso y puede llevar entre 45 a 60 días dependiendo de la complejidad del producto.
Son tan resistentes como el plástico o la melamina pero seguro para la salud de nuestros pequeños y mejor para el medio ambiente. Están disponibles en seis colores y son aptos para el lavavajillas. Además sirven para alimentos tanto fríos como calientes.
Pinchando en aquípodéis ver el video de cómo los fabrican; es increíble que algo tan especial tenga un precio tan estupendo (24 euros el juego).
Sin duda, estos serán los platos que use Emma en unos meses.
Y si nos toca mudarnos de nuevo a otro país o continente … se vienen con nosotros!